Excedente de cotización de salud

Luego de un fin de semana de cine, competencias escolares y paseos, me encontré el lunes con el polémico tema de la colusión de las Isapres, discusión obligada en todos los medios de comunicación, ya que cinco entidades previsionales de salud estarían actuando como "un cartel" por bajar concertadamente la cobertura de los planes.

Con esta noticia dando vuelta en el ambiente, se me vinieron a la memoria los olvidados “Excedentes de cotización de salud”, y pensé que era un excelente tema para La Colectividad, leída por mucha gente joven que está recién comenzando a trabajar.

Primero que todo debemos recordar que los trabajadores dependientes están obligados a hacer un aporte para financiar sus gastos de salud, ya sea en Fonasa o en una Isapre, que se refleja en la cotización mínima obligatoria del 7% de la renta imponible.

¿Cómo se genera el excedente?

Cuando ese 7% es menor que el precio del plan contratado, el trabajador deberá solicitar a su empleador que le descuente un adicional y así poder cubrir su plan. En este caso obviamente no existe excedente alguno.

El "excedente de cotización legal" se produce sólo cuando el 7% de la remuneración imponible supera el precio del plan de salud pactado y, además, este es igual o inferior a 4,2 UF que es lo máximo que se puede cotizar, según la ley.

Es decir, si su cotización obligatoria alcanza el máximo que se puede cotizar: 4,2 UF y el plan contratado con la Isapre vale 4,13 UF, genera un excedente de 0,07 UF.

El excedente es un concepto que sólo existe en el sistema de Isapres, las cuales funcionan en base a planes de salud que tienen un precio determinado. En cambio, en Fonasa los beneficios no están asociados a un precio, por lo cual no se generan excedentes.

¿Y dónde están los excedentes generados?

Al momento de ingresar a una Isapre o cuando el afiliado se cambia de plan las Isapres pueden ofrecer planes de salud con o sin renuncia al excedente.
En el caso de aceptar un plan con renuncia al excedente, la Isapre debe compensar con mayores beneficios de salud.
En el caso que no se renuncia a dichos excedentes, la Isapre está obligada a abrir una cuenta corriente en la misma institución con los excedentes a nombre del afiliado que los genere.

El dinero ahí depositado estará sujeto a intereses y reajustes y por lo mismo las Isapres tendrán la facultad de cobrar comisiones semestrales por concepto de costo de mantención.

¿En qué usar el excedente?

El saldo acumulado en la cuenta podrá ser requerido por el afiliado para los siguientes fines:
Cubrir cotizaciones en caso de cesantía.
Copago de prestaciones médicas.
Financiar prestaciones de salud no cubiertas por el plan.
Cubrir cotizaciones adicionales voluntarias.
Financiar un plan de salud durante el período en que se tramita la jubilación.

¿Y qué ocurre cuando el afiliado se cambia de Isapre?.

Si se cambia de Isapre, estos fondos siguen siendo del afiliado y deben ser trasladados. Si se va a Fonasa, estos recursos dejan de ser patrimonio del trabajador y pasan a formar parte del fondo común y no podrá disponer de ellos.

Y en caso de fallecimiento del afiliado, el dinero de esta cuenta pasa a formar parte de su masa hereditaria.

Algunos consejos:

Cuando se suscribe un plan colectivo o matrimonial, el afiliado renuncia tácitamente a los excedentes.

El monto de los excedentes a destinar a la cuenta corriente individual no podrá ser superior al 10% de su cotización legal para salud. Si así fuera, la Isapre deberá ofrecerle un plan con un precio más cercano al 7%.

Dado que la Isapre cobra comisiones por la administración de los excedentes, es aconsejable que en lo posible los excedentes se utilicen; de lo contrario, pueden consumirse.

En el caso de necesitar mayor información: les dejo un link a la Super de Salud.